LOS OCHO
MAGNIFICOS
O
LA
PERVERSION DE UN SISTEMA
LA
INVESTIDURA DE TRUMP ¿EL COMIENZO DE UNA NUEVA ERA?
Si hubiesen
sido siete se podría dar lugar a la confusión con la película del
Oeste, Los siete magníficos de Sturges, o tal vez con Los siete
samurais de Kurosawa, pero al ser ocho, no ha lugar a la confusión
ya que me quiero referir a los ocho multimillonarios que, según
Oxfan,en Davos, tienen tanto dinero como tres mil seiscientos
millones de las personas más pobres.
El dato
refrenda la tesis de la tendencia del capital financiero a la
acumulación y concentración del dinero, y con el dinero,
influencias, persuasión,poder. El dato es revelador,
relevante, demoledor y terriblemente repugnante al mostrar la
injusticia sin ningún atisbo de pudor, propósito de corrección ni
de valor para la discrepancia de los políticos, los nuestros, para
denunciar esa perversión; por supuesto, la prensa airea el dato, el
tiempo justo en la que es, ineludiblemente, noticia, y luego, a otra
cosa.
Los ocho
multimillonarios, en el que en orden de acumulación, el segundo
lugar lo ocupa un compatriota, el señor Ortega, Amancio Ortega, de
Zara-inditex, así como la naturaleza de los multimillonarios, cuatro
de ellos ligados a la tecnología con base en internet – Microsoft,
Facebook, Oracle y Amazon – y solo los otros cuatro, con empresas
como textil, moda, medios de comunicación, seguros, me plantea
preguntas, pues los ligados a la red – internet – tienen un
origen, diré, reciente, y los otros cuatro, entre los que está el
español, Ortega, no me parecen el tipo de empresas, salvo las
ligadas a la red, recientes pero sin el tiempo suficiente para haber
marcado el terreno de la organización del sistema (otra cosa es el
rol que empiezan a jugar la informática en la producción y los
negocios), hace preguntarme, ¿son los grandes banqueros, que sí
tienen poder e influencias, más pobres, o más listos?, porque el
modo de producción mercantil está marcado por esa alianza de la
banca y la industria, el capital financiero, que parece
estar en contradicción, últimamente, como revela la tensión en
Estados Unidos, a tenor de las recientes elecciones, en la que ha
sido investido presidente un multimillonario desvinculado de
la industria pesada, base de la industria militar.
Pero esta
reflexión no agota otras preguntas más, políticas, menos teórica,
pero no menos importante, porque son ellas, ese tipo de preguntas las
que se evitan en los medios y en los cenáculos políticos, porque
pondrían al descubierto la perversión del sistema, por eso está
mal visto que Oxfan incordie, desde que sustituyó
a la ONU cuando esta varió la presentación de sus informes
cambiando ese dato por el más digerible indice de desarrollo
humano que sirve lo mismo para un roto, que para un descosido, es
decir, camufla el expolio, la expropiación del pueblo trabajador, de
la que son cómplices necesarios, los Estados y sus camarillas
políticas, incluidas las leales oposiciones, sin las cuales, en los
diferentes Estados soberanos saltaría el engaño, la
perversión, que al hacerme la reflexión, aparece con claridad,
desde los muertos del Yak 42, a las subidas, tres veces, en tres
días, del precio de la electricidad; la exportación de electricidad
a Europa, más barata que en España, porque así se obtiene
beneficio.
Esta
acumulación y concentración, nucleada en estos ocho
multimillonarios, ¿tendrá algo que ver con la guerra no declarada a
Oriente Medio? ¿Tendrá algo que ver con las subidas de la luz tres
veces, en tres días? ¿Habrá alguna relación entre los ahogados en
el Mediterráneo cuando huyen de sus países porque los matan y no
tienen futuro?, porque a mí me parece, que sí, que hay una
relación. Tal acumulación y concentración de dinero sería
imposible sin una red estructural, a escala globalizada que permiten
los negocios libres de impuestos, con el silencio cómplice de
Estados, gobiernos, medios y oposición. ¿Se atrevería Unidos
Podemos a plantear en la Cámara esta cuestión?
Si Unidos
Podemos hiciese esa pregunta en sede parlamentaria tendría la virtud
de sacar el dato repugnante de la distribución de la riqueza del
aséptico foro de Davos y plantarlo en medio de la política real,
sin posibilidad , a partir de ahí, de eludir el tema, un tema que
está en la raíz de los problemas cotidianos de la gente corriente,
que a pesar de lo que dice la BBC, la gente común y corriente sí
aporta, sino, ¿de donde iban a sacar el dinero?, ¿la riqueza? Es el
pueblo trabajador el que genera beneficios porque se trabaja para una
sociedad, a la que se empobrece, por eso, si se hiciera esa pregunta
en el parlamento, sería referencia para todo el orbe.
Tendría alcance global, ámbito internacional, convirtiéndose en
referencia estratégica. Unidos Podemos tiene militantes y dirigentes
capaces, formados, cultos y con acceso a datos oficiales que les da
el ser parlamentarios, representantes electos, teniendo la
virtud de aclarar mucho el próximo debate, que tendrá lugar en
Vista Alegre. Si eludieran el reto, la gente no les tomará en serio,
al considerarles más de lo mismo.
¿SERIA
POSIBLE UNA GUERRA CIVIL EN ESTADOS UNIDOS?
Estados
Unidos ha animado muchos golpes de Estado fuera de su territorio.
Analistas documentados han referido que el 11S de 2001 hubo un golpe
de Estado encubierto durante el tiempo en que Bush estuvo
transportado de la escuela en la que había ido de visita en
Florida, y el reciente golpe de Estado turco, contra Erdogan, tuvo
detrás la inteligencia de un general estadounidense, de cuatro
estrellas, retirado del servicio, es decir, jubilado, extremo este,
muy obscuro, pero, dentro de Estados Unidos, el ejercito no tiene
tradición golpista; allí, en la sede del capitalismo global, manda
la burguesía que forma el complejo militar industrial. ¿Por qué
esta digresión?
Lo que
ocurra en un gran país, y Estados Unidos, lo es, tiene importancia
global y conviene prestarle atención porque esa potencia es además,
la que lidera a la burguesía, en su conjunto, que a pesar de las
diferencias entre las diferentes burguesías, esta es referencia
obligada, teniendo en cuenta, a mayor abundancia, que la estructura
internacional surgida de la guerra mundial, tiene el sello bien
visible de sus decisiones, que fueron aceptadas de grado o por
fuerza, y que siguen vigentes, así que las tensiones internas que
empiezan a revelarse a raíz de la elección del multimillonario
señor Trump, ya 45º presidente de Estados Unidos requiere la
atención necesaria para conjeturar las posibles opciones; desde
luego, con una buena información, el perfil sería mucho más
nítido, pero ese no es mi caso, ya que mi única opción es la red.
Es
necesario empezar poniendo de manifiesto la hostilidad que el
personaje se ha granjeado dentro de los mismísimos Estados Unidos, y
es muy sintomático el despego que suscita en amplias capas de la
ciudadanía, pero lo más relevante es la observación de una tensión
política en la propia élite del capitalismo. Caractericé la
política de Trump de pequeñoburguesa, no obstante ser él un gran
burgués, un multimillonario, pero su política, rompe con la solidez
de la élite capitalista, en la medida, que otros burgueses
desaprueban sus acciones, al romper la dinámica que la
administración, en los sucesivos relevos presidenciales a la cabeza
del Estado habían, aceptado sin ruido, los cambios de los partidos.
Un Estado como los USA, tiene una inercia que no puede variarse de
buenas a primera porque la maquinaria presenta resistencia y la
previsible ruptura de tratados, que deberíamos suponer –
TTP/NAFTA/TTIP – no son caprichos de un presidente, por ejemplo,
Obama, sino expresión de los intereses de la clase capitalista
estadounidense, que recoge su vitalidad expansiva, no como
pueblo, sino como clase que quiere expandir su mercado, un
mercado mundial, sujeto a sus leyes y reglas. Esta ruptura es la que
causa las tensiones y la que manifiesta las contradicciones de la
política expresada en su discurso de investidura, que resaltan
los propios medios estadounidenses.
Su
desacuerdo al criticar el dinero invertido en el proyecto de
Lockheed-Martin es un desacuerdo con el sector industrial que la
burguesía industrial estadounidense tiene que maridar,
necesariamente, con el capital bancario nacional, ya que ese producto
industrial, esa mercancía, el caza furtivo, y otro productos
semejantes, no puede ser fabricado más que dentro del marco nacional
estadounidense, por eso, su decisión revela falta de entendimiento
de la necesidad expansiva de la propia burguesía estadounidense.
Su visita a
la sede de la CIA, la Agencia, es otro escollo no pequeño que tiene
en su carrera de los próximos años, ya que los espías, la
inteligencia ( destruir después de leer, otra película,
sarcástica ), no confiarán en un presidente que desconfía de
ellos, complicando el necesario entendimiento. Sin duda, Trump es un
hombre inteligente, no podría ser de otro modo, el hombre que tiene
en su cartera el armagedón, y a un ex general de cuatro
estrellas, al mando de las fuerzas armadas, al que le gustan las
peleas, no puede ser muy descuidado pero ese hombre, Trump, no tiene
las simpatías de una gran parte de sus conciudadanos, desde luego,
las mujeres no lo aprueban al convocar, en un pis pas, una
manifestación al día siguiente de su investidura que a decir de la
prensa, nunca ante se vio en Washington una manifestación política
más numerosa, 500 000 mujeres, la mayoría tocadas con un gorrito
pussy, que no significa precisamente, gatito – miren el dicionario
–. Otra parte, el mundo del cine le es desafecto y los abogados han
prometido asistir gratis a los manifestantes en discrepancia,
detenidos, y además, el comercio minorista ha acordado un boicot a
las empresas de Trump y familiares.
Pero es en
el discurso de investidura donde el electo presidente, muestra las
contradicciones más obvias; no negaré que las intenciones puedan
ser limpias y sinceras pero no se puede decir al pueblo que que
quieres devolverles el poder, cuando se toman medidas para que
los bancos campen a sus anchas y que suponen un regalo de 25 mil
millones de dólares para los poderosos, si además lo haces
creyéndote el héroe liberador, Batman, pero empleas el lenguaje del
villano malvado, Bane, porque eso dice mucho de las inquietudes de
donde recibe el nutriente espiritual el hombre más poderoso del
mundo. Tal vez, por aquí comencemos a entender los desacuerdos en el
seno del complejo militar industrial – entre industriales y
especuladores – y por qué una guerra entre ellos no sería una
guerra civil sino el comienzo de una guerra mundial, o una
revolución, igualmente mundial, que pudiera alumbrar una nueva era.
La
tendencia a la acumulación y concentración de la riqueza no se
detendrá y habremos de estar muy atentos a que pasará en Oriente
Medio y con los combatientes que salen del escenario de la guerra,
porque su destino es Europa y Bill Gates nos previene, en Davos, de
lo terrible que sería el terrorismo químico-biológico. ¿Podrían
los terroristas tomarlo como una señal?
Una
pregunta en el parlamento, por parte de Unidos Podemos podría
poner sobre el mundo real, al descubierto, la perversión de
un sistema que acumula y concentra riqueza en muy pocas manos,
mientras empobrece a la sociedad, y esclaviza a los
trabajadores; mientras el presidente de los burgueses del mundo
se cree Batman, pero, entre dientes, se le escapan las palabras del
malandrín Bane. Inquietante, porque entre tanto, los recortes
continúan, los salarios y las pensiones bajan y precios no paran de
subir.
jmrmesas
veintidós
de enero de dos mil diecisiete