DE TESOROS Y TESOREROS
La crisis económica
tiene implicaciones desagradables e insoslayables, así que una
factura de teléfono impagada, las prioridades demandaban tareas más
vitales, me han apartado del debate político, mucho más
interesante, determinante, desde una perspectiva social, que la
anodina cotidianidad de un viejo luchador, pero mi tesorería
personal no encontraba acomodo para remendar tanto siete.
LAS CUENTAS QUE NADIE
QUIERE MIRAR
Una vez destapado el caso
Bárcenas, a instancias de una comisión rogatoria judicial que tiene
atrapado al ex-tesorero del pp, Bárcenas, en el pp, todos tratan de
escabullir sus responsabilidades, para que el peso de la ley recaiga
sobre el presunto culpable, pero este, ante la posibilidad de tener
que acabar sus días en la cárcel, amenaza con tirar de la manta y
dejar al descubierto las vergüenzas de lo populares, porque en ese
viaje, estaban todos.
Las noticias conocidas en
periódicos y tertulias, desveladas por una supuesta investigación,
de alguien que dice donde mirar, nos muestran una trama
de una finca en Argentina, productora de cítricos, parte de su
producción contratada por Coca Cola, con unas macro dimensiones
(tres veces las dimensiones de Barcelona) que hasta contaba con un aeródromo privado, y cuentas en paraísos fiscales moviendo dinero
entre Bermudas y Panamá, luego depositado en EEUU, cuyos titulares
-de la finca- eran, casualmente los ex tesoreros del pp, Sanchís y
Bárcenas, ex tesoreros, cuya proximidad es una constante, porque
Sanchís relevó a Naseiro, como Bárcenas relevó a Sanchís, y
aquí, esta trama de relevos, revela algo más que afinidad entre los
ex tesoreros, revela un comportamiento político, del que los
dirigentes políticos se quieren escapar, y esta es la incoherencia
de los políticos y el enfado de Bárcenas, que ante la perspectiva
de tener que acabar sus días en la cárcel, misteriosamente,
empiezan a conocerse datos sobre dirigentes del partido y diputados
del mismo, implicados en cobrar en negro. Los datos están en la
prensa nacional, El mundo, El país, etc., que dan cuenta de los
detalles, pero lo que no dicen los periódicos son las consecuencias
de tales comportamientos.
Empezaré por la pregunta
que me hago: ¿Qué es un partido político?
Obviando las respuestas
clásicas, y según un esquema empresarial, un partido político es
una organización cuya producción es generar información,
¿desinformación, según convenga?, que a su vez exige propaganda y
publicidad sobre los objetivos propuestos, y continuando con el
esquema de reflexión, una tal empresa resulta, financieramente, muy
costosa, porque esa generación publicitaria demanda un entramado
organizativo destinado a obtener los medios financieros que
soporten la generación de esa información-desinformación.
En una empresa de
publicidad, los costes de las campañas de difusión, los pagan
quienes encargan la difusión y publicidad del producto que se quiera
lanzar al medio social -al mercado-, pero cuando lo que se quiere
lanzar al medio social es una determinada manera de gestionar los
asuntos públicos, cuando lo que se quiere lanzar al medio social es
una determinada concepción de la sociedad, que implica una
determinada visión de la vida, de la historia, de la administración
de la sociedad, que el proceso histórico ha generado en su devenir,
eso, financieramente, es una tarea ruinosa, si se encara según el
esquema del beneficio inmediato, que es lo que persigue, según el
esquema comercial, el que encarga la publicidad y difusión de lo que
quiere vender, pero cuando lo que se quiere vender es
una determinada concepción de la política, para que
eso sea rentable, solamente ese esfuerzo financiero es
viable cuando se trata de una campaña electoral, en cuyo caso, los
presuntos beneficiarios -la burguesía, carreristas,
que están en la política para forrarse, fanáticos
moralistas de las virtudes de lo privado- se implican,
económicamente, financiando la campaña. Mientras tanto, en el
periodo que se extiende entre los procesos electorales, el
mantenimiento de la empresa publicitaria, el partido, es un
constante chorro de dinero que se evapora, y aquí es donde entra en
funcionamiento el entramado organizativo gestionando la
obtención de dinero.
Como cualquiera
mínimamente sensato entenderá, al frente de ese entramado
organizativo, los dirigentes políticos, escogen a personas fiables,
bien sean escogidas personalmente, o proponiéndolas al órgano de
decisión, pero siempre dignas de la entera confianza del partido,
por cuyas manos estará destinado a pasar asuntos de máximo
compromiso, por tanto, gente capaz de aguantar un hipotético
chaparrón de incomodidades, porque el sostenimiento de tal empresa
difícilmente puede financiarse con las magras cuotas de los
estrictos afiliados. Piensese en la millonada que puede suponer la
sede principal del partido, situada en un entorno comercial carísimo,
los diferentes locales situados por todo el territorio, personal
encargado de mantener el funcionamiento del partido, así como los
viajes, encuentros, conferencias, libros, folletos, etc., destinados
a difundir las excelencias de un modo de entender la vida y la
historia, que hace aguas por todas las junturas, y se
entenderá la importancia determinante de hacer que todo eso funcione
como una maquinaria bien engrasada.
Por eso, ahora que vienen
mal dadas, resulta importante echar balones fuera, haciendo recaer la
financiación del partido sobre los hombros del ex-tesorero, cuando,
por acción u omisión, la dirección del pp, está implicada en el
tema de la financiación del partido.
De esta particular crisis
de tesorería partidaria, encuentro dos vertientes importantes, una,
problemas en el seno del pp, ya que los matices sobre las
insinuaciones acerca de los perceptores honorables que
cobran en B y lo consignan en su declaración de
hacienda, pretende exonerar a una parte de elementos, probablemente,
prescindibles, pero significativos en el gobierno del cauteloso
Rajoy, suficientemente importantes como para minar el prestigio de la
actual dirección, ya que el hecho del conocimiento de los problemas
sobre la financiación del partido popular se haya sabido a través
de un periódico, -El mundo- cuyo director tiene lazos de amistad con
Aznar, revelaría diferencias sobre la política que Rajoy está
llevando a cabo; dos, la ineludible responsabilidad en la dirección
y de la dirección en la financiación del partido popular, y por
extensión de los partidos políticos, que no pueden, ni deben,
desentenderse de orientar la obtención de los medios financieros.
Esa responsabilidad de la
dirección en la financiación del partido, no se puede obviar
haciendo recaer los problemas de corrupción sobre los hombros de
una sola persona, ni siquiera de un solo departamento -la tesorería-
sino que entronca con una determinada concepción de la política,
de la sociedad, que tiene su correlato con los problemas que
arrastra el sistema, en su conjunto, y que ha dado pie, en
el desarrollo del proceso a la existencia de los paraísos fiscales,
precisamente porque las concesiones fraudulentas de licencias,
movidas en el tráfico de influencias, generadoras de sumas de dinero
negro, imposibles de contabilizar sin una fiscalización y su
correspondiente gravamen, ha terminado pudriendo al conjunto del
sistema, facilitando la especulación, en detrimento de una economía
productiva, y esto, en un ámbito que va más allá de los limites
del Estado español, porque el sistema capitalista de producción
está encenagado a lo largo y ancho del mundo civilizado,
de un continente, a otro, a terminado por convertirse en el modo
de vida adoptado por el sistema de producción, de una parte a
otra del planeta.
El tema no es importante,
solo porque afecte a un grupo de notables del partido en el gobierno,
ni siquiera porque en el transcurso de la investigación hayan
aparecido otros, no menos importantes personajes del partido popular
con cuentas en Suiza, sino que el tema es importante porque el
momento político concreto de la sociedad española está recorrida
por un malestar, a penas contenido, que afecta a sectores tan
variados como a la sanidad, encabezada por los médicos, la
administración de justicia, jueces incluidos, enseñanza, el recorte
de las libertades, que hace del ejercicio de los derechos
democráticos un peligro, casi una vuelta al pasado, etc., sino
porque el grado de corrupción afecta a la cabeza del Estado, tocando
a elementos muy próximos a la familia del Rey, y todo esto no es
sino la demostración de una sociedad en efervescencia porque el
sistema está agotado y si bien todo esto no es nuevo, porque siempre
ha sido así, la diferencia está en una cierta sensación de que
esto, ya no puede seguir así.
LA ALTERNATIVA NECESARIA
Este esquema de
financiación del partido en el gobierno se extiende a otros
partidos, porque el modo de entender el funcionamiento político del
partido como máquina recolectora de votos, cuya máxima utilidad se
alcanza en el periodo electoral, es útil a la burguesía, pero,
definitivamente, demoledor, anodino, frustrante,
para la izquierda, cuya visión transformadora se va diluyendo día
tras día, creyendo que esa transformación social se alcanzará en
las elecciones, cuando lo que se obtiene, en esos momentos, es el
resultado del esfuerzo del partido, de los militantes y
simpatizantes, que no esperaron al momento de las
elecciones, comprometiéndose, en duro trabajo cotidiano
defendiendo los objetivos, las metas que el partido se fija y da
sentido a la existencia como formación política concreta, que tiene
una visión de la sociedad y de la historia, diferente, por la que
merece la pena luchar, esforzarse, y llegado el caso, sacrificarse,
algo verdaderamente duro, ingrato y difícil, que nunca hará un
mero publicista, y que en el seno del movimiento obrero
internacional, tiene sobrados ejemplos de socialistas, anarquistas,
comunistas, que entregaron sus vidas defendiendo sus ideas, y que
actualmente, la izquierda ignora y olvida.
La izquierda tiene que
romper con este esquema de funcionamiento partidario porque en el
momento presente se abre, en el mundo, en Europa y concretamente en
España, una perspectiva de transformación social, incalculable,
primero porque la situación mundial, no termina de remontarse porque
no se han tomado ninguna medida para controlar el desafuero de la
especulación financiera, segundo porque los Estados europeos que
forman la Unión Europea reconocen, a su pesar, que desengancharse no
es posible sin arrostrar una lucha entre ellos sin ningún beneficio,
y el propio Cameron no ha tenido más opción, para capear el
temporal, que hacer lo que Artur Mas, jugar el farol de abandonar la
Unión Europea, cuando nunca han estado, tratando de ganar un tiempo,
que cada vez es más corto, tercero porque en España, todos los
parches que se han puesto tratando de evitar tocar los problemas
históricos están saltando, en un momento en la que forma del Estado
está cuestionada, y la burguesía española, que
históricamente, ha ido de la mano de la corona,
sabe que la alternativa republicana introduciría el poder de la
ciudadanía con unas características determinantes, y cuarto, porque
durante estos años de crisis y recortes, aún no se ha oído desde
ningún lugar, la voz del socialismo, la voz de la izquierda
proponiendo medidas capaces de plantear ante la sociedad un futuro
capaz de producir en cooperación, coordinando las economías para
poner el modo de producción al servicio de la personas, contra un
mercado cuyo resultado es el enriquecimiento obsceno del escaso uno
por ciento mundial, y a eso hay que ponerle punto final, organizando
la movilización sobre la base un programa para cambiar de época,
para cambiar la historia, porque desde el poder controlado por la
burguesía, las personas no son más que mercancía prescindible y
las personas, el pueblo, es el alma del progreso humano.
La alternativa en España
es república. Conocer, juzgar y condenar a los corruptos. Quienes
son los defraudadores. Donde están escondidos los dineros. En Europa
la alternativa es coordinar las economías. Los Estados Unidos de
Europa. Un gobierno elegido por los europeos y responsable ante un
parlamento con poderes. La erradicación de las cuentas secretas de
la banca, conocidas como paraísos fiscales.
Esta alternativa,
precisada, aumentada y corregida serían las líneas básicas de un
programa para el cambio, pero la práctica de confiar el cambio a la
espera de las elecciones, mella y embota las energías de los
luchadores de la izquierda porque es necesaria una dirección que se
comprometa con un programa semejante, que rompa con la dinámica
partidaria de creer en el partido como agencia de publicidad, y que
el futuro se decide en el parlamento, cuando se esta viendo y
viviendo como el futuro se decide en despachos ajenos a cualquier
tipo de control que no sea el escogido cogollo de gente poderosa, que
no tiene que responder ante nadie, y que si le pillan, siempre tendrá
abogados defensores de renombre e influencias para burlar la ley, ese
partido, esa dirección es la clave para cambiar el curso, y no tiene
porque ser español, pero hoy, España, se encuentra en una situación
crítica que, de producirse esta combinación de factores, podría
desencadenar, en Europa ese proceso de cambio global.
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treinta y uno de enero de
dos mil trece