martes, 10 de marzo de 2015

FLECOS INTERNACIONALES DE LAS POLÍTICAS NACIONALES

















FLECOS INTERNACIONALES DE LAS POLÍTICAS NACIONALES


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COMO MOVILIZAR A LA CIUDADANÍA PARA EVITAR UNA GUERRA EN EL CORAZÓN DE EUROPA




Los desaforados esfuerzos de Estados Unidos, tirando de los ingleses de su Majestad Británica para corregir los acuerdos logrados para garantizar el respeto de alto el fuego en Ucrania, del trío continental – Putín, Merkel, Hollande –, descontrolada porque Poroshenko no logra imponer su autoridad a una élite de oligarcas vendidos a los traficantes del Pentágono, no son menos patéticos que las desaforadas críticas de Mariano Rajoy a la política del nevo gobierno griego de Alexis Tsipras, que en último término es el reconocimiento del agotamiento de una situación mundial que hay que recomponer porque las bases sobre las que se asentó el poder de la superpotencia que dirigió los destinos del mundo, están cuestionados porque los cambios sobrevenidos han dado al traste con los instrumentos que hacían posible la subordinación y el compromiso subsecuente.




NO ES POSIBLE UNA NEGOCIACIÓN SIN FUERZAS




Hace algo más de un año hice un apunte sobre un artículo del inefable Voroufakis en el que expresaba mis dudas sobre el objetivo del artículo escrito en el que consideraba como deber ingrato salvar el capitalismo. Creo que mi apunte respondía meridianamente claro el error conceptual del que partía porque el capitalismo actual no admite reparaciones cosméticas, y como está demostrando la realidad, las negociaciones con los representantes políticos de los mercados, que no de los ciudadanos, aunque estos les hallan votado, las condiciones no pueden ser más deprimentes, pues la ciudadanía griega voto a SYRIZA porque esta negaba el pago de la deuda, y nuestro amigo, ha tenido que comenzar desdiciéndose y aceptando una negociación encaminada a pagar.


Resulta que la proximidad del árbol impide la visión del bosque, y es por eso que el hecho de traer a colación los esfuerzos de los economistas atizando leña a Voroufakis – SYRIZA – o el intento de corregir al triplete continental, de Obama, sobre Ucrania, hace necesario remontarse o separarse del ámbito nacional para tener la perspectiva adecuada que nos permita apreciar hacia donde derivará el conjunto. Es evidente que las deudas son impagables porque están hechas para someter a la ciudadanía; que tal actitud no puede conducir más que al desastre porque la fortaleza de los oprimidos está en las convicciones que sustentan la lucha y no en revisar las convicciones o trampear en un territorio en el que el capitalismo es dueño y señor, por tanto, tratar de ganar tiempo es algo carente de sentido porque el tiempo juega a favor del contrario, y embarrase en la política nacional no es práctico porque ahora todo se juega en el terreno internacional, y la fortaleza de la negociación está en jugar la carencia de legitimidad de los mercados para pasar por encima de la nación. Esa es la fortaleza que debe jugar SYRIZA – Voroufakis –, dicho esto para que se aplique el remedio PODEMOS.


Que SYRIZA no tenga un proyecto de política internacional no quiere decir que la política nacional de SYRIZA no sea revolucionaria, porque el sentido revolucionario de la política nacional de SYRIZA está, precisamente, en defender el derecho de la nación ante los mercados, y ese derecho se pelea en el terreno internacional enfrentando las maniobras de la burguesía euro-estadounidense (la negativa griega a sumarse a las sanciones a Rusia, duele, porque, además, las sanciones, acortan el margen de maniobra de las economías nacionales europeas, echándose en brazos del acuerdo transatlántico que busca el complejo militar industrial USA), y buscando acuerdos con la izquierda mundial y sobre todo europea.


La burguesía que está comprendida en el núcleo duro del uno por ciento teme lo que pueda pasar en los próximas semanas que restan para las legislativas de España, porque saben que la ciudadanía mundial está cada vez más acosada por una economía que está hecha para satisfacer a una élite y no a la sociedad, baste decir que una quinta parte de los alemanes – quien lo hubiese imaginado – están convencidos que solo una revolución puede poner límites a la voracidad de los poderosos, por tanto no es extraño que los gurús de los mercados se paseen por Europa, advirtiendo ¡cuidado con lo que hacéis!, pues una mayoría de PODEMOS en las próximas legislativas podría elevar la moral de esa parte de la sociedad europea, de la que los alemanes son el botón de muestra, y decidir unir fuerzas contra un capitalismo, que está resistiendo el temporal de su deslegitimación, gracias a su excelente estructuración internacional, a sus organizaciones y a su agilidad para controlar el flujo vital del capitalismo: el dinero.




EL PODRIDO RÉGIMEN DEL SETENTA Y OCHO




Las fatigas que SYRIZA está experimentando queriendo ganar tiempo es la mejor demostración de que no vale la pena rebajar los objetivos creyendo que de ese modo se facilita la vida al sufrido pueblo griego, y PODEMOS no es ni de lejos, comparable a SYRIZA, pues ellos son una organización batallada y respetada mientras que PODEMOS está recibiendo los primeros embates de una tormenta en gestación. SYRIZA no tiene una política internacional, y si esto es así en una organización que lleva años de lucha, PODEMOS esta improvisando un ballet de encuentros con gerifaltes que no auguran otra cosa que un alejamiento de la ciudadanía para entenderse con los dueños de la deuda. La política de PODEMOS es la política de Izquierda Unida, y esto no lo digo como una reivindicación sino para reseñar la carencia de una visión de clase capaz de percibir el agotamiento del modo de producción mercantil, y plantear la batalla por la construcción de una alternativa al capitalismo.




Nadie duda de que la podredumbre de la política del régimen que sustituyó al franquismo está tan podrido que solo se aguanta por la certeza de no tener repuesto. Un gobierno quemado por la corrupción, un partido cuyos tesoreros están llamados al banquillo, una Casa Real igualmente manchada, una orla de banqueros implicados en fraudes da suficiente como para exigir elecciones anticipadas porque ese es el procedimiento normal cuando un gobierno está implicado en la mentira, en la corrupción y se ha demostrado que no respeta la ley; los países con los que tenemos fronteras comunes, relaciones y compromisos, con menos evidencias habrían exigido elecciones anticipadas, sin embargo, aquí se espera agotar la legislatura queriendo, de este modo, estructurar una organización que pueda convertirse en gobierno. Tan seguros están, que quieren prever un equipo de gobierno en vez de una estructura orgánica capaz de asegurar y garantizar el enlace con la población, la ciudadanía, la clase proletaria, que habrá de ser la que de fortaleza y confianza a un partido que no tiene arraigo social y carece de enlaces con la ciudadanía. No serán las componendas con los gerifaltes del ibex35 lo que mejore la situación de las familias, ni los desahucios, ni a los enfermos de hepatitis, no, serán explicaciones preparando la lucha por recuperar lo que los mercados nos han robado, con leyes tramposas hechas a su medida, para extorsionar y retorcer a la ciudadanía, leyes que después de quitarte la casa te exigen que pagues una hipoteca, para tenerte amordazado, atado y sumiso, de otro modo es inexplicable que el uno por ciento vaya a tener más dinero, propiedades y poder, que el noventa y nueve por ciento del mundo – apuntan los informes Oxfan–, y eso, que las constituciones del mundo civilizado dice que el pueblo es fuente de poder y legitimidad. Y encima nos toman por estúpidos.




UCRANIA O COMO PREPARAR LA GUERRA CONTRA LA MASA CRÍTICA SOCIAL CAPAZ DE CAMBIAR LA HISTORIA




A medida que el sistema se agota, en términos de utilidad social, la producción pierde valor de uso mientras gana valor de cambio; el exceso de producción no encuentra su correspondiente mercado porque la realidad tiene sus límites, y esto es otra de las múltiples señales que deberían de tomar en cuenta los políticos, estadistas y estrategas que piensan que de esta crisis saldremos, como de las anteriores, cuando la burguesía que lidera el complejo militar industrial, atrincherada en el gobierno de Estados Unidos, no para de llevar la provocación al extremo de meter las narices dentro del territorio ucraniano.




Históricamente, la burguesía del complejo militar industrial no ha cejado en su empeño de hostigar a la URSS, cuando, en sus temores, suponían la amenaza a los negocios de la libre empresa; baste citar los misiles instalados en territorio turco, en los años cincuenta del pasado siglo, y la decisión de poner al mundo al borde de una guerra nuclear para impedir que en Cuba se instalaran su contrapartida. Ahora Rusia ha ocupado el lugar que antes ocupó el imperio del mal (según Reagan), porque en su delirio, el complejo militar-industrial atribuía al Estado soviético todos los vicios y lacras que son inherentes a sus intimas obsesiones por dominar, y explotar al mundo, como está demostrando, ahora, la realidad cotidiana, queriendo meter, a toda costa, a la OTAN, a las puertas de Rusia.




La deriva del capitalismo ha superado el marco de una confrontación por el control de la economía para adentrarse en delirios de pretender constituirse en luz y guía del resto del mundo; una suerte de álter ego divino, porque la información, control y poder – no solo económico-productivo, sino sobre las potencialidades de las ciencias y tecnología, medicina, psicología, etcétera, les permite creerse capaces de dictar al mundo su ley, por eso, porque saben que esa norma no será aceptada por las buenas, preparan la guerra, porque tras sus negocios solo es posible una paz sumisa, obediente, sin rechistar, y a eso se dedican extendiendo el terrorismo, porque esa ha sido su práctica histórica, algo que, un lector curioso puede conocer, indagando en los textos. El acuerdo transatlántico perseguido por Obama, llevar la OTAN a las puertas de Rusia, las sanciones, son el prologo de una confrontación que, persigue el enfrentamiento bélico, y que, sagazmente, Putín está manejando con habilidad y tacto, pero Putín es un oligarca ex soviético, y ni la izquierda radical ni la ciudadanía puede dejar en manos ajenas la defensa de los intereses comunes, por eso la mejor defensa es la movilización ciudadana, nacional e internacional.




MOVILIZACIONES DEFENSIVAS




La clase obrera es sobre todo, la clase obrera organizada, los trabajadores y obreros que están en los sindicatos, partidos y organizaciones militantes, y esa clase obrera no puede dejar pasar el silencio cómplice de unas direcciones sindicales vendidas; de unos dirigentes incapaces de organizar la lucha contra un endurecimiento económico que lleva a los trabajadores en activo a las puertas de la esclavitud, porque los sucesivos recorte hacen del trabajador un individuo entrampado, endeudado, incapaz de luchar, porque Rajoy ha dado forma legal a la ley mordaza que existe en los sindicatos, cuando los delegados y militantes sindicales, no se atreven a protestar o son silenciados para evitar el conflicto, mientras las direcciones de comisiones obreras y de la UGT negocian con la patronal. Es indecente e inaceptable que eso suceda, cuando una enorme cantidad de abnegados delegados sindicales luchan y se estrellan, muchas veces, contra la propia organización sindical que no presta atención a la organización de la lucha.




Esos militantes entregados tienen toda la autoridad para exigir que las direcciones sindicales explique que ha ocurrido con los fondos que maneja el sindicato, quienes se han beneficiado y por qué. Tienen toda la autoridad para exigir un congreso y renovar, de abajo arriba y de arriba abajo toda las direcciones sindicales sobre la base de organizar la lucha, y organizarla para llevar a la sociedad a revelarse contra la autoridad de los mercados, sus portavoces, sus políticos camuflados y sus políticas de miserabilización de la ciudadanía. Esos militantes tienen toda la autoridad para negar el respaldo a uno dirigente sindicales, que cuando menos son completamente inútiles.




Organizar la movilización nacional es muy importante, pero no menos importante sino más es organizar la movilización internacional, y en ese orden no estaría de más que las organizaciones de la izquierda radical se aplicaran a estudiar que posibilidades se abren para una acción coordinada mundial, y es en este sentido, que una movilización internacional contra las sociedades offshore, comúnmente señaladas como paraísos fiscales adquiere todo el valor al reunir su implantación mundial con el objetivo de ocultar de la mirada de los Estados el recorrido de las finanzas y los patrimonios que se acogen al secreto, convirtiéndose en fuente de extorsión.




La izquierda radical europea debería de hacer un esfuerzo por coordinarse e impulsar, a escala internacional una campaña para exigir la erradicación de tales santuarios financieros, con el más pacífico de los métodos, concienciando a la ciudadanía mundial de la necesidad de tener control de los movimientos de capitales y que estos movimientos estén sometidos al control de los Estados con una legislación común, recogiendo firmas que se llevarían a los foros internacionales, con copia para los parlamentos nacionales. Una movilización internacional, coordinando foros de discusión, conferencias, asambleas, manifestaciones y culminando la campaña con la entrega de las firmas recogidas, podría crear vínculos y favorecer estructuras más estables como medio de prevenir las maniobras de los que quieren llevar – el poderoso uno por ciento – el agua al molino de la guerra.




jmrmesas


diez de marzo de dos mil quince















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